Una rana saltó un día a una olla de agua hirviendo. Inmediatamente brincó para escapar de ella. Su instinto fue salvarse y no aguantó ni un segundo en el recipiente. Otro día, esa misma olla estaba llena de agua fría. Otra rana saltó dentro y nadó. Estaba feliz en esa ‘piscina’ improvisada. Lo que el animal no sabía es que la hornalla estaba recién encendida por lo que el agua se iba calentando poco a poco. Así que al tiempo el agua fría se transformó en agua templada; pero la rana se fue acostumbrando. Allí seguía, nadando plácidamente en ella. Sin embargo, poco a poco, el agua subió de temperatura. Llegando a estar tan caliente que la rana murió sofocada. Ella, sin embargo, no se había dado cuenta, ya que el calor aumentaba de forma gradual y se iba acostumbrando.
Uno de los medios por los que los narcisistas patológicos ejercen el control de su pareja es la “violencia económica”, que consiste en ir monopolizando de manera gradual la administración del dinero. Controlando cómo, cuándo y en qué se utilizan los recursos económicos.
El narcisista parte de la creencia que “lo que yo genero me pertenece y lo que tú generas me pertenece también.”
Al principio es posible que la pareja, generosa, no entienda que haya personas que puedan pensar así, e inocentemente debido a que posee una elevada escala de valores, sueña con construir una pareja en donde ambos compartan responsabilidades. Una pareja en la que haya solidaridad, afecto y trabajo en equipo para crecer juntos siendo buenos compañeros.
Entonces como la ranita cocinada a fuego lento, es casi imposible percibir este tipo de violencia invisible. Porque al principio es muy sutil y encubierta. Todo sucede puertas para adentro y los de afuera piensan que el narcisista actúa en buena fe y para el bien de la familia. Por ejemplo: vende elementos que le pertenecían a su pareja desde antes de la conformación de la sociedad conyugal (el matrimonio o la unión civil) y se guarda ese dinero. La gente dice “seguro que lo va a utilizar para la familia”.
Otro ejemplo de este tipo de violencia es cuando el narcisista logra tener la información de cada movimiento de su pareja aunque lo que él genera a nivel económico es un verdadero misterio para su partenaire.
Si el Narcisista logra convencer a su pareja de que no trabaje y se convierte en el proveedor de los recursos materiales, él sabrá cómo comportarse primero haciéndole creer a su víctima que jamás les faltará nada y una vez que la tenga atrapada, dejará lentamente caer su máscara. Así, podrá extorsionar a su presa exigiéndole que cumpla todos sus caprichos aislándola, devaluándolo, menospreciándola y desvalorizando todos los aportes que haga al “equipo”.
La pareja, que a ese momento ya depende plenamente de él, estará bajo el efecto del Vínculo Traumáticos de Traición (del que ya hablamos en notas anteriores, una especie de síndrome de Estocolmo).
El narcisista tendrá poder sobre cada decisión y la víctima habrá perdido sus libertades personales.
Esto puede cronificarse aun después de una separación y divorcio, ya que si el manipulador descarta a la víctima; pero es el que provee los recursos económicos, ejercerá una extorsión sutil en donde la víctima sentirá que si no responde a cada uno de los caprichos de su “ex”, esté la dejará de patitas en la calle, llena de deudas, sin pagar el colegio, la prepaga de los hijos, etc. De esta manera la víctima sigue soportando las humillaciones y manipulaciones del psicópata.
En la mayoría de los casos donde este sujeto posee mucho poder adquisitivo, va a amenzar con quitarle hijos. Hace un trabajo paulatino de poner en contra a los hijos del miembro no psicópata de la pareja. Lamentablemente, muchas veces lo llevan a cabo llegando a ejercer el síndrome de alienación parental.
Qué ocurre cuando el psicópata quiere parasitar los recursos económicos de una pareja que tiene talento para generar dinero?
De manera sutil ira manipulando a su presa para que sola le diga que “el dinero es de ambos”. El narcisista expresará que se siente desvalorizado y manipulará hasta conseguir el manejo del dinero.
Muchos de estos individuos llegan a manejar las cuentas bancarias en donde se les deposita el sueldo completo a sus parejas y en algún momento logran apoderarse de estas cuentas, quitando el manejo total a la persona que genera el dinero; administrando absolutamente todos los recursos materiales de la familia.
Este tipo de control atenta directamente contra la autonomía de la víctima y si en algún momento la presa logra separarse, se encontrará con que el psicópata no querrá cumplir con las responsabilidades que tiene para con los hijos. Dirá frases como ¨´yo a mis hijos les doy amor pero no tengo dinero¨´ Sin tener en cuenta que cuando hay hijos que alimentar el ¨´no tengo¨´ no es una respuesta aceptable.
La paradoja de este estilo de narcisista es que jamás les falta dinero para cambiar el auto, irse de vacaciones con su nuevo suplemento y siempre tienen dinero para los cigarrillos en el caso de que fumen. Y bebidas alcohólicas jamás le faltan.
El dinero para sus excesos siempre será suficiente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario